lunes, 7 de abril de 2014

El SIRRUSH, EL DRAGON DE BABILONIA

Uno de los acontecimientos arqueológicos más grande del siglo veinte fue el descubrimiento de la magnífica Puerta Ishtar de la antigua Babilonia. En ella, entre animales comunes como el toro o el león, se hayo una peculiar criatura, el Sirrush o Mushusu.

Las excavaciones comenzaron en 1899, y durante tres años el Profesor Robert Koldewey, arqueólogo alemán, t...
rabajó para descubrir este espectacular edificio dedicado al dios del sol, Marduk. La puerta fue erigida durante el reinado del rey Nebuchadnezzar II (605-562 aC). Pero tras la caída de la ciudad hacia el año 39 aC, se enterró bajo las arenas mesopotámicas y el mundo la olvidó hasta que el equipo de Koldewey la resucitó.

Los suyos fueron los primeros ojos del mundo moderno que contemplaron su deslumbrante panoplia de ladrillos muy vidriados de color cobalto y filas horizontales de animales representados en bajorrelieve realista.

Estaban presentes tres tipos de animales. El toro y el león se inspiraron en animales vivos, pero, ¿y el dragón? Aunque estaba representado de forma realista, seguramente se trataba de una bestia completamente mítica e imaginaria – ¿o no? El animal sagrado de Marduk, el dragón de Babilonia era conocido como Sirrush, o Mushusu, y Koldewey no estaba convencido de que no fuera nada más que una criatura fabulosa de leyenda. Aunque las representaciones babilónicas de todas las otras bestias fabulosas habían cambiado dramáticamente a lo largo de los siglos, las del Sirrush habían permanecido iguales, como las de los animales reales.

Pero si en realidad el Sirrush estaba basado en una criatura real, ¿cuál podría ser esta criatura?

Con cuerpo esbelto de cuatro patas, cubierto de finas escamas, una cola larga y un cuerno encima de su cabeza, era visiblemente diferente de cualquier animal conocido en los tiempos modernos. Así que Koldewey concibió la fascinante idea de que esta bestia tipo dragón podría haber sido creada a partir de un dinosaurio vivo desconocido.

En la actualidad, muchos zoólogos reconocen que las representaciones del Sirrush se asemejan un tanto a un retrato deformado de algunos reptiles gigantes del mundo prehistórico, particularmente los dinosaurios herbívoros de largos cuellos conocidos como saurópodos.

Además, las discrepancias de forma entre el Sirrush y los saurópodos podrían explicarse fácilmente si los pintores responsables de las representaciones hubieran trabajado no a partir de observaciones directas, personales de dinosaurios vivos, sino meramente a partir de descripciones de segunda mano de viajeros u otros testigos. Por tanto, si unos 65 millones de años después de la extinción oficial de los dinosaurios, el linaje de los saurópodos aún existe, escapando al descubrimiento científico formal pero, conocido para los antiguos babilonios, ¿dónde debemos buscar estas maravillas vivas?
 

LA BESTIA DE LOVELAND

La Bestia de Loveland, es una criatura pseudocríptido, de forma reptiliana o anfibia, perteneciente a la cultura popular norteamericana.

Su aspecto morfológico sería similar al de un humano u Homínido, y su cabeza sería la de reptil o un anfibio (las fuentes no se ponen de acuerdo), siendo en definitiva, su aspecto, parecido al de una rana de un tamaño amplio....


Se han relatado supuestos encuentros entre esta criatura y humanos en los años 1955, 1972 y 1998, siempre en lugares cercanos a ríos o lagos, supuestos hábitats de estos animales.

En mayo de 1955, un hombre reportó un supuesto avistamiento extraño mientras guiaba hacia su casa a las 3:30 am en Loveland, Ohio, noreste de Cincinnati. En su reporte alegó haber visto tres criaturas en forma de reptil o anfibios que habría estado parada al lado de la carretera, y se acercó para verlas desde su auto por tres minutos. Una de las criaturas de forma de rana cargaba algún tipo de barra o cinta sobre su cabeza, y chispas salían del artefacto. Se dice que el conductor notificó a la policía de Loveland sobre lo que vio, aunque la policía no halló ninguna evidencia de las criaturas.

La historia hubiese pasado desapercibida, pero sucedió que luego de casi veinte años después, en marzo de 1972, se conoció la historia de un supuesto anónimo oficial de la policía de Loveland que guiaba su automóvil en la carretera Riverside a eso de la 1:00am, viajando lentamente debido al hielo que habría habido en la carretera. Se dice que este anónimo oficial de la policía supuestamente también habría visto un animal parado al lado de la carretera, el cuál pensó al principio que se trataba de un perro; pero cuando los faros del auto habrían enfocado al animal, este se habría levantado de una pose agachada, dejando ver que tenía tres o cuatro pies de estatura con una piel de cuero y una cara parecida a un lagarto o una rana. La bestia habría mirado al oficial por un momento antes de brincar sobre la verja de seguridad y dirigirse hacia el río Little Miami que estaba abajo. El oficial habría vuelto a la escena con otro policía varias horas después, y se dice que estos habrían encontrado unas marcas de raspados en el terraplén donde algo aparentemente se deslizó hacia el río.

Dos semanas después, se dice que otro policía no identificado de Loveland también habría reportado un supuesto encuentro parecido. Se dice que en la misma carretera, este otro oficial habría visto un animal en el medio del pavimento, el cuál pensó que estaba muerto o se moría por haber sido arrollado por un auto. Se habría bajado de su auto para sacar el animal de la carretera, sin embargo se dice que de repente el animal brincó hacia arriba y el oficial vio que era una extraña criatura en forma de rana. Se dice que el extraño ser comenzó a escapar, cojeando como si estuviera herido, y se dirigió hacia la valla de seguridad hacia el rio. El oficial habría disparado al monstruo mientras se escapaba, pero aparentemente no lo habría herido. Ninguno de los oficiales habría reportado a la horrible criatura, pero la supuesta información de su avistamiento se filtró a la prensa o esta la creo, y fue así como comenzó la moderna leyenda de la rana de Loveland y pronto se propagó lejos y ampliamente; y comenzaron a aparecer otros reportes de supuestos avistamientos de esta criatura. Así, un granjero de Loveland también reclamo haber visto una criatura parecida a una rana en marzo de 1972.

Los investigadores partidarios y fanáticos de los fenómenos paranormales comenzaron a especular numerosas hipótesis sobre la conexión de los supuestos avistamientos de 1955, y de la posibilidad de hipotética raza secreta de hombres lagarto habitando los ríos de Ohio.

Los escépticos han sugerido que si los supuestos oficiales realmente vieron algo y no inventaron la historia, lo que sucedió fue que solo pudieron haberse confundido y realmente solo haber visto otro animal, como un lagarto monitor del Nilo o una gran iguana, que pueden tener hasta seis pies de largo. Pero de ser así, estos reptiles tuvieron que haberse escapado de un zoológico o de otra manera ser llevados allí, dado que no son nativos de la zona; hecho que en todo caso no sería improbable.

Aparte de esta criatura de apariencia anfibia, se dice que reptiles anormalmente largos y hombres lagartos también habrían sido reportados en otras partes de Estados Unidos, incluyendo el Hombre lagarto de Waine, y el Gran lagarto de Milton, en Kentucky. El más celebre sucesor de la rana de Loveland en años recientes fue la locura del Hombre Lagarto que se propagó en Bishopville, South Carolina, en 1988. Un hombre reporto haber visto supuestamente una bestia reptil de siete pies de ojos rojizos y apéndices de tres dedos persiguió su auto a través de una carretera rural a 40 millas por hora. Un gran número de otros avistamientos le siguieron, y los oficiales de policía descubrieron huellas de tres tobillos. Pero últimamente, la única evidencia de peso que el hombre lagarto dejó atrás fue gruesas cuentas de banco de los vendedores locales de pegatinas de autos y camisetas alusivas a la bestia.
 

LA BESTIA DE GEVAUDAN


Entre 1764 y 1767, más de 120 personas, mujeres y niños, casi en exclusiva, fueron horriblemente asesinados –a dentelladas– por una bestia misteriosa. Todo esto ocurrió en la región montañosa del Gévaudan, en el centro de Francia, y nadie logró resolver el enigma a pesar de las insistentes batidas y de las inmensas recompensas que ofrecía el Rey. La bête (bestia) del Gévauda...n pasó a formar parte de la mitología del país, de la misma manera que el monstruo de Lago Ness para los escoceses.
Lo cierto es que la bestia de Gévaudan aterrorizó a la población de Aveyron en el siglo XVIII y quebrantó la autoridad de Luis XV, convirtiéndose rápidamente en un asunto de Estado.

Cazadores de toda Francia atraídos por la generosa recompensa que se ofrecía por su piel, trataron de cazar a lo que se intuía podía ser un enorme lobo de un poder devastador inimaginable. Le calcularon 100Kg de peso y el pueblo pensaba que era el mismo demonio.

El primer ataque de la bestia se produjo el 30 de Junio de 1764 y su primera víctima una niña de 14 años, Jeanne Boulet, ese mismo verano se cobró más vidas y asesino 2 niñas más, 2 niños y una mujer de 32 años. En invierno el número de víctima se incrementaba alarmantemente incluso asesinando dos veces por semana.

Solía arrancar de un solo bocado la cabeza de las víctimas, lo que puede darnos una idea del tamaño y la fuerza de su mandíbula. En tan solo un año se había cobrado 54 víctimas. El monarca alarmado por tan abrumantes cifras decide enviar a sus tropas de choque, los "dragones", que formaban la élite del ejército real. Envió 4 tropas de caballería con el fin de realizar una batida que acabara de una vez con la bestia.

El jefe de una de las tropas quedo sorprendido al ver a la bestia, según su descripción era casi tan grande como su caballo pero infinitamente más rápida y ágil, tras tratar de abatirla a disparos sintió que las balas no eran capaces de traspasar su piel.

Otras descripciones le señalaban como un enorme lobo de aspecto muy extraño, con el lomo rayado y una línea negra que le recorría desde el cuello hasta la cola, el color de su cuerpo era rojizo, con el morro afilado, una cola muy larga y fuerte y extraordinariamente móvil y con unas fauces desmesuradas.

Escultura en Francia que representa a la Bestia de Gévaudan.

Los esfuerzos de los "dragones" eran en vano, no solo se debían enfrentar al difícil duelo de encontrar a la bestia además tenían otros duros competidores, los caza recompensas, que atraídos por el precio que se puso por dar fin a la vida de la bestia les tendían emboscadas y les confundían con pistas falsas.

La bestia arrancaba la cabeza de sus víctimas de un solo bocado. Por mas lobos que abatían las víctimas no cesaban, murieron decenas de estos animales. Sin duda el comportamiento de la bestia no se asemejaba al de un lobo común pues expertos cazadores de toda Europa trataban de eliminarla con las técnicas que se empleaban para la caza de estos.

La gente empezaba a sentirse muy asustada, ni la participación del Rey había conseguido aplacar a la bestia. Los clérigos aprovechaban para hacer su campaña diciendo que la bestia solo atacaba a las jóvenes más lascivas, los nobles acusaban a los gitanos pues decían que alguna de las bestias de su circo debía haber escapado. También se apunto a un terrateniente que había recorrido África con una compañía comercial, criaba mastines asilvestrados, lobos, leones y tigres. El pueblo llegó a pensar que había cruzado a estos animales hasta dar con la bestia.

Finalmente la bestia fue muerta y la leyenda cuenta que fue abatida con una bala de plata hecha tras fundir una medalla de la virgen. El monstruo fue llevado ante el Rey, más tarde fue embalsamado y años después sus restos desaparecieron. Era algo parecido a un lobo gigantesco de fauces enormes.